Y si el perro reactivo es el otro ¿Qué puedo hacer?

 


Muchas veces nos genera estrés el comportamiento de los otros perros y no del nuestro. Nuestro perro va bien por la calle, tranquilo, es obediente y puede ir suelto que no se mete en líos ni es peligroso para los demás. No persigue ni bicis, ni coches, ni niños sueltos.

Es además un perro con el que nos entendemos a la perfección, tenemos nuestro lenguaje común muy afianzado y llevamos una vida en armonía, es decir, disfrutamos de una convivencia en sintonía entre nosotros.

Pero esta sintonía se ve afectada cuando otros perros aparecen en nuestra vida, son perros que aún no han alcanzado esa madurez y equilibrio necesarios para llegar a la convivencia en sintonía que todos anhelamos. 

¿Qué podemos hacer nosotros? Evidentemente no podemos controlar el mundo exterior y eso nos puede generar estrés, si es así lo primero será trabajar ese estrés siendo conscientes de qué podemos y que no podemos hacer. Porque aunque no podamos controlar el mundo exterior siempre podemos controlar cómo nos afecta a nosotros y así poder actuar de la manera más eficiente y sana.

Para empezar a trabajar sobre nosotros mismos, que es el primer paso, te recomiendo utilices la Técnica DiiPi, es perfecta para esto.

Además te dejo un enlace a un vídeo dónde trato este tema 




Entradas populares